5 consejos para esterilizar y desinfectar sus recipientes para laboratorio

La mayoría de las operaciones realizadas en el laboratorio involucra la mezcla de numerosas sustancias y el uso de diversas herramientas. Para que cada uno de los experimentos sean exitosos, tanto las sustancias como los materiales para manipularlas deben cumplir con ciertas condiciones. En el caso de los recipientes para laboratorio, la higiene es sumamente importante, pues la presencia de bacterias, virus o microorganismos puede alterar las reacciones y modificar totalmente los resultados. Para evitar esto, es necesario aplicar correctamente los métodos de desinfección correspondientes.

Existen distintos tipos de gérmenes y microorganismos esparcidos en el ambiente que pueden adherirse con facilidad a los instrumentos que se usan diariamente en el laboratorio. Esto crea grandes dificultades en los estudios bacteriológicos, especialmente cuando es necesario obtener las especies microbianas en estado de pureza. Con el fin de subsanar este tipo de inconvenientes, se usa la esterilización para destruir todos los gérmenes vivos que existan sobre los objetos o sustancias que se emplearán.

La esterilización comprende todos los procedimientos físicos, mecánicos y químicos que se emplean para destruir, inactivar o retener gérmenes en general y algunos patógenos en particular. A través de esta operación, los materiales de laboratorio para determinados análisis alcanzan un estado de desinfección que evita la contaminación de las muestras y garantiza la pureza de las reacciones químicas.

Para esterilizar exitosamente los materiales para laboratorio, especialmente los recipientes y la cristalería, hay algunas consideraciones importantes que debe tener en cuenta y que facilitarán el procedimiento. A continuación, le damos algunos consejos que le ayudarán con la desinfección de sus herramientas de laboratorio.

 

  1. Organice un área específica para la desinfección de los materiales

    Las áreas de limpieza y esterilización para los materiales de laboratorio deben incluir autoclaves, una trituradora, una unidad de eliminación de basura conectada al alcantarillado público, fregaderos hondos, máquinas para lavar material de vidrio, estufas de desecación, estufas de esterilización y mesas grandes de acero inoxidable. Estas habitaciones, además, deben tener una disposición adecuada para evitar cualquier posible mezcla de materiales contaminados y descontaminados.Al momento de disponer un área para la esterilización, debe poner especial cuidado a la eliminación de los vapores que puedan emitirse durante el proceso. Es muy importante que se clasifiquen correctamente los materiales y recipientes contaminados al momento de trasladarlos a esta zona; pues, dependiendo del tipo de sustancia con el que hayan interactuado, se usa un abordaje para su desinfección.

  2. Identifique el tipo de contaminantes presentes en los recipientesCuando vaya a desinfectar sus herramientas de laboratorio, debe saber que cada sustancia o reacción deja contaminantes específicos. Hay microorganismos criorresistentes (resistentes al frío) y termorresistentes (resistentes a las altas temperaturas); sin embargo, normalmente se clasifican por la temperatura a la que se reproducen. Por ejemplo, muchos hongos se destruyen con la temperatura, pero sus esporas aún pueden reproducirse cuando encuentran un medio apropiado, rico en nutrientes y humedad.
  3. Aplique cuidados previos al material antes de esterilizarloAntes de meter los recipientes en el autoclave u horno, debe asegurarse de que estén limpios y libres de todo tipo de sustancia o materia orgánica. Para limpiar la cristalería debe usar detergentes especiales para laboratorio y agua desmineralizada. En caso de no cumplir con este procedimiento previo, aun cuando se sometan a la esterilización térmica, no se asegura que los materiales queden totalmente desinfectados.
  4. Nunca someta los recipientes a esterilización si están húmedos o aún llenos de materia orgánicaJusto luego del lavado profundo de la cristalería, debe dejar que cada uno de los recipientes para laboratorio se escurran totalmente y asegurarse de que no quede ningún tipo de sustancia en ellos. Solo luego de que estén totalmente secos es que podrá someterlos a la esterilización en horno, estufa o autoclave.
  5. Regule cuidadosamente la temperatura que aplicará para la esterilizaciónLa mayoría de las herramientas de esterilización se termorregulan por medio de termostatos hidráulicos. Es importante que esté atento siempre a este termostato y aplique a los recipientes el calor estrictamente necesario para esterilizarlos sin causarles ningún tipo de daño por exceso de temperatura.

Además de estas recomendaciones, siempre es importante que siga un manual de procedimientos exactos para la esterilización de sus recipientes para laboratorio. Ante dudas con las estufas, hornos y autoclaves, es aconsejable que consulte los manuales que proveen sus respectivos fabricantes. Recuerde que los resultados de sus análisis y procedimientos de laboratorio dependen en gran parte de las condiciones y correcta manipulación de sus instrumentos.

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